Métodos De Cultivo De Bonsáis. Cómo Cultivar Un árbol Bonsai. Foto

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Métodos De Cultivo De Bonsáis. Cómo Cultivar Un árbol Bonsai. Foto
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Vídeo: Como producir Bonsáis Parte 1 - TvAgro por Juan Gonzalo Angel 2024, Marzo
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El cultivo de bonsái es un constante descubrimiento, descubrimiento y trabajo creativo que hace a una persona verdaderamente feliz. Y para lograr este efecto, necesita conocer los métodos y algunas características del cultivo de bonsai. Para cultivar bonsáis de acuerdo con todas las reglas, necesita platos especiales, herramientas, cuidados especiales, etc. etc. En este artículo hablaré directamente sobre el proceso de crecimiento.

Bonsai de Sargent Juniper. Edad 15. Estilo Han-Kengai
Bonsai de Sargent Juniper. Edad 15. Estilo Han-Kengai

Contenido:

  • Elegir plantas para bonsai en el vivero.
  • Bonsai sacado de la naturaleza - Yamadori
  • Bonsai de especies arbóreas nativas y sus beneficios.
  • Bonsai cultivado a partir de esquejes
  • Bonsai cultivado a partir de semillas
  • Tamaños de bonsai
  • Características del cultivo de bonsai.
  • Bonsai de envejecimiento artificial
  • Mantener pequeñas agujas y brotes en pinos y abetos.
  • Capas de aire en bonsai

Elegir plantas para bonsai en el vivero

Las plantas jóvenes compradas en el vivero se pueden usar para formar hermosos bonsáis con relativa rapidez. La mayoría de las plantas que se venden en los viveros se han cultivado en contenedores durante muchos años. Como resultado, tienden a desarrollar un sistema de raíces denso y bien formado, que es ideal para la formación de bonsáis.

Se saca la planta del contenedor, se retira la tierra vieja y se realiza la primera poda de raíces para obtener un sistema radicular plano. Luego, la planta se vuelve a trasplantar a un recipiente normal lleno de tierra para macetas para bonsáis. Muy pronto, tales plantas ya se pueden trasplantar en contenedores especiales bajos (cuencos).

El surtido de plantas que se venden en los viveros es muy amplio y fácil de confundir. Por eso lo mejor es revisar a fondo todas las plantas disponibles en el vivero e intentar encontrar los ejemplares más adecuados para la formación del bonsái. Además, vale la pena visitar regularmente los centros de jardinería y viveros y buscar allí los rincones más lejanos, donde, posiblemente, se pueden ubicar árboles enanos envejecidos prematuramente.

Es cierto que se recomienda a los principiantes que seleccionen plantas más jóvenes, a partir de las cuales es más fácil formar bonsáis. La elección de las plantas debe ser muy crítica. Los árboles bonsái deben estar densamente ramificados hasta el suelo para que después de la poda pueda dejar ramas adecuadas para diferentes estilos.

Al inspeccionar las plantas, se debe excavar ligeramente la tierra alrededor del tronco para poder ver bien la base del tronco. Las plantas injertadas deben injertarse de tal manera que el bonsái injertado no muestre el lugar del injerto.

Se necesita un cuidado especial al comprar plantas con una copa muy densa, cuyo interior suele estar completamente desnudo. Estas plantas tardan mucho tiempo en aparecer nuevos brotes en el interior de las ramas. Esto se aplica principalmente a grandes ejemplares de abeto común (Picea abies) "Pumila Glauca" y abeto gris (Picea glauca) "Conica".

Los rododendros con forma de corona esférica son más adecuados, ya que dan brotes jóvenes de madera vieja con relativa rapidez. Para la formación de bonsai, puede recomendar con seguridad todas las formas y variedades de pino de bajo crecimiento, arces de abanico no injertados, arce de campo, todos los tipos de agracejo, especies locales de olmos, carpe no injertado, cedro elfin (pino enano), enebro, espino y muchos otros.

Bonsai. Composición de varios árboles
Bonsai. Composición de varios árboles

A los recolectores con la experiencia necesaria y que prefieran plantas costosas y difíciles de formar, solo se les puede recomendar que busquen material de partida adecuado en los viveros. Desde que Bonsai se hizo famoso en Alemania, también aparecieron los primeros viveros, que, junto con el surtido habitual, comenzaron a cultivar árboles destinados a la formación de bonsai.

Ahora tienen una buena selección de plantas adecuadas y muy económicas que pueden hacer bonsáis muy bonitos y valiosos en un par de años. Por lo tanto, las plantas de vivero son la mejor manera de aprender a formar bonsáis.

Bonsai sacado de la naturaleza - Yamadori

Hay hermosos árboles en la naturaleza que, a pesar de su edad, son excelentes para la formación de bonsáis. Principalmente, en lo alto de las montañas, en el límite de los bosques, se pueden encontrar árboles centenarios que no superan los 50 cm de altura. Una temporada de crecimiento muy corta permite que las plantas crezcan solo unos pocos milímetros por año. Debido a los constantes vientos fuertes, las tormentas de hielo y nieve, permanecen enanos y adquieren una forma extraña, a menudo muy curva.

Para desenterrar plantas en la naturaleza, debe obtener el permiso del propietario. Al desenterrar la planta, se planta una plántula en su lugar, si es posible. Para formar un bonsái armonioso a partir de este material de origen, es necesario tener la experiencia adecuada. En primer lugar, puede ser muy difícil para los amantes del bonsái novatos hacer algo decente con este material entrelazado, intrincado y de formas abstractas. Por eso se les anima a buscar ejemplares más jóvenes con un sistema radicular compacto.

Los árboles de 80 años de 50 a 60 cm de altura a menudo tienen raíces de 5 mo más de largo. Estas plantas se encuentran en suelos rocosos, ya que sus raíces, en busca de humedad y nutrición, crecen profundamente en las grietas y hendiduras de las rocas. Para desenterrar tales plantas, es necesario cortar hábilmente sus largas raíces. En algunos casos especialmente desfavorables, este procedimiento se alarga durante años, de modo que durante este tiempo se forman nuevas raíces en la base del tronco, gracias a las cuales la planta excavada puede sobrevivir.

El momento más adecuado para desenterrar plantas es a principios de la primavera, cuando el suelo ya se ha descongelado y las plantas aún no han comenzado a crecer. De la herramienta, debe tener una pala plegable, un pico de escalada, una podadora, una sierra plegable, un martillo y un cincel.

Las raíces de las plantas excavadas se colocan en bolsas de plástico con musgo húmedo para resistir el transporte. En casa, estas plantas se plantan primero en grandes contenedores de plástico.

El suelo utilizado es granulado de arcilla japonesa (Akadama), lo más grande posible, 6-12 mm. Después de la siembra, las plantas se colocan en un lugar sombreado protegido de los fuertes vientos. Después de unos 3 años, se pueden trasplantar a un recipiente más pequeño. Por lo general, las plantas excavadas tardan de 5 a 10 años en producir un bonsái poderoso e impresionante. Los yamadori más viejos tardan aún más en arraigarse bien en el recipiente.

Las plantas de vivero, por otro lado, enraizan perfectamente, con mayor frecuencia en el mismo año. Si han comenzado a formarse hojas fuertes o agujas en las puntas de los brotes, esto es una señal segura de que la planta está bien enraizada. Solo después de eso es necesario comenzar a fertilizar con fertilizante. Al trasplantar, los árboles de hoja caduca echan raíces mucho más rápido que las coníferas. El enebro desenterrado en la naturaleza echa raíces especialmente lentamente en el recipiente.

Por eso es recomendable desenterrar las plantas no en un solo paso, sino cortar gradualmente las raíces largas año tras año. Después de unos años, tal planta se puede desenterrar sin dolor.

Los árboles de hoja caduca más jóvenes, densamente ramificados con troncos del grosor de un dedo están bien para los principiantes, aunque no son los típicos yamadori. Para los coleccionistas de bonsáis experimentados, también existe la opción de tomar plantas de su jardín.

Con el tiempo, a menudo es necesario eliminar algunos árboles del jardín, porque se plantaron con demasiada frecuencia o porque la cuestión de la remodelación del jardín está en la agenda. Estas plantas son el material de partida perfecto para el coleccionista de bonsáis. Muy a menudo se distingue por troncos del grosor de los brazos, bases de raíces poderosas y ramas largas y fuertes.

Estas plantas también tardan un poco en enraizar bien, por lo que primero se plantan en grandes contenedores de plástico. Después de unos tres años, dependiendo del tamaño de la planta, se pueden trasplantar a contenedores más pequeños. Ya en el recipiente de plástico, puede comenzar a dar forma a la planta aproximadamente hasta que después de tres años se trasplante a un recipiente de bonsai adecuado. Para tales plantas, la fase de desbaste dura aproximadamente 46 años. Pero luego obtienes un bonsái a la edad de unos 50 años, que se ve muy impresionante y poderoso.

Rododendro en forma de bonsai. La planta tiene 22 años
Rododendro en forma de bonsai. La planta tiene 22 años

Bonsai de especies arbóreas nativas y sus beneficios

Hay una serie de especies de árboles nativas de Europa que se adaptan bien a la formación de bonsáis. A menudo, las razas locales son incluso mucho más resistentes que las especies exóticas. A esto hay que añadir que conocemos mejor sus necesidades en cuanto a ubicación, calidad de composición y estructura del suelo, así como posibles plagas y enfermedades. Los árboles que crecen en nuestros bosques son resistentes a las heladas y, por lo tanto, no necesitan invernar en interiores.

Puede encontrar muchas preguntas por sí mismo en el lugar de crecimiento natural de los árboles seleccionados. En principio, el bonsái se puede cultivar a partir de cualquier especie arbórea europea que nunca antes se haya utilizado como bonsái. Hay muchas posibilidades para esto.

En primer lugar, puedes simplemente experimentar en la planta con tierra, luz y agua para riego, lo que, en general, difícilmente vale la pena recomendar, o puedes dar preferencia a una solución más aceptable, que consiste en conocer las condiciones de crecimiento de tal o cual especies en la naturaleza.

Al cultivar bonsáis de especies de árboles locales, puede tener una idea clara de las condiciones de crecimiento de un árbol en particular si lo observa detenidamente en su hábitat natural y se hace las siguientes preguntas:

  • ¿En qué suelo crece el árbol?
  • Cuanta luz necesita?
  • Ubicación del árbol: ¿sombreado o claro?
  • ¿El árbol solo crece en un bosque o desfiladero protegido?
  • ¿Qué lugares prefiere: seco o húmedo?

Ejemplo: un bonsái debe estar formado por pino negro. En busca de árboles viejos, suelen acudir a bosques altos y escasos. Las copas de pino negro están densamente cubiertas de agujas. El resto de la corona, principalmente su parte inferior, permanece transparente. Esto se debe a que el pino negro es una planta muy amante de la luz y desarrolla exuberantes agujas solo en la parte superior de la copa.

A partir de esto, se debe suponer: los bonsáis de pino negro necesitan una iluminación muy brillante, por lo tanto, el lugar para ellos debe estar a varios metros de las paredes y edificios y ligeramente elevado sobre el suelo para que los bonsáis también reciban un poco de luz desde abajo.

En condiciones naturales, los pinos crecen sobre cimientos de arena calcárea o kárstica bien drenados. Por lo tanto, para el bonsái, se elige una mezcla de suelo de arena gruesa o grava con una pequeña adición de humus. Al formar un bonsai de pino negro, no es en absoluto necesario copiar con precisión la forma natural del árbol, también son posibles las formas tradicionales japonesas.

Así, las formas naturales de árboles de cualquier especie que crezca en nuestro país pueden servir como muestra para su posterior transferencia al bonsái. Para aquellos que quieran practicar el arte de cultivar bonsáis de forma más intensa y decidida, es necesario establecer como regla prestar atención a los hermosos árboles de la calle y estudiarlos de cerca, especialmente aquellos por los que pasas todos los días.

Al formar un bonsái, no es necesario en absoluto guiarse por las formas clásicas japonesas o chinas. Cuando se trabaja con especies locales, es mucho más razonable tomar como referencia las formas de los árboles que crecen en nuestros bosques. Tenemos algunos árboles muy hermosos que merecen ser modelados en bonsái.

Además, es mucho más fácil examinar y estudiar cuidadosamente los árboles en la naturaleza y luego transferir su forma a los bonsáis. ¿No es interesante imaginar que un roble de sólo un metro de altura, junto con ramitas y ramas, puede parecer un árbol adulto viejo? Entre las especies de árboles que crecen en nuestras latitudes, hay al menos una docena que ciertamente pueden servir como un buen material de partida.

Cualquiera que de vez en cuando intente utilizar especies de árboles para la formación de bonsáis, que son casi desconocidas en esta capacidad, muy pronto llega a la conclusión de que no todos los árboles son adecuados para formar un bonsái a partir de ellos. Entonces, por ejemplo, el castaño tiene flores y hojas increíblemente hermosas y, además, también tiene una copa magnífica, pero debido a sus enormes inflorescencias y hojas, este árbol no es adecuado para la formación de bonsáis.

Por el contrario, los arbustos de espino no son muy atractivos por naturaleza y no tienen mucho encanto, sin embargo, para su uso como bonsai, son una excelente fuente de material.

Por lo tanto, al elegir especies de árboles locales, debe responderse mentalmente a las siguientes preguntas:

  • ¿Esta especie de árbol tiene hojas pequeñas?
  • ¿Produce brotes jóvenes de madera vieja?
  • ¿Tiene muchas ramificaciones?
  • ¿Sus brotes crecen con fuerza?
  • ¿Crece bien en una maceta pequeña?
  • ¿Está bellamente formada la base de las raíces?

Sin embargo, además del tipo de madera, el aspecto y el estado de la planta individual también son decisivos a la hora de elegir el material de partida.

Bonsai. Estilo Youse-Ue
Bonsai. Estilo Youse-Ue

Bonsai cultivado a partir de esquejes

Cultivar bonsáis a partir de esquejes también consume mucho tiempo y requiere paciencia. Es cierto que cultivar plantas de esta manera proporciona una ganancia anual en comparación con las plántulas.

Los esquejes son trozos cortados de ramas (brotes leñosos) sin raíces que se cortan de plantas madre sanas y se insertan en el suelo para enraizar. El momento adecuado para injertar coníferas es a principios de septiembre o abril.

Los esquejes en árboles de hoja caduca se cortan mejor desde principios hasta finales de junio. Para estimular la formación de raíces, los esquejes se pueden tratar con un estimulador de crecimiento especial (fitohormona). Los esquejes de árboles de hoja caduca echan raíces después de algunas semanas.

En las coníferas, el proceso de enraizamiento puede tardar más de un año. Es mejor usar mini-invernaderos de plástico como utensilios para enraizar esquejes. Su parte inferior está llena en dos tercios con una mezcla de arena y turba y los esquejes se clavan en el suelo a la misma distancia entre sí.

Luego, los esquejes se riegan cuidadosamente y el invernadero se cubre con una tapa transparente. Para colocar un invernadero con esquejes, se elige un lugar oscuro y la humedad del suelo se monitorea diariamente, si es necesario, se riega el suelo en el invernadero.

Cuando aparecen hojas jóvenes en los esquejes, lo que es posible en un par de semanas, esto significa que las raíces ya se han formado. Ahora la cubierta transparente del mini-invernadero se puede levantar de vez en cuando para ventilar, con el fin de endurecer las plantas jóvenes y acostumbrarlas gradualmente al clima habitual. Después de unos meses, los esquejes ya están bien enraizados y se pueden plantar en contenedores separados.

Para ello, se utiliza una mezcla de suelo suelto que contiene arcilla para plantas. Este año, las plantas jóvenes no necesitan ser alimentadas con fertilizantes, ya que el suelo fresco contiene una cantidad suficiente de nutrientes. Para invernar tales plantas, es necesario cuidar un refugio especial, ya que sus delicadas raíces aún no pueden soportar heladas prolongadas. Los contenedores con plantas jóvenes deben estar bien excavados en el suelo y cubiertos con una película doblada en varias capas en la parte superior para protegerlos del viento.

No todos los árboles se reproducen por esquejes. Por ejemplo, es imposible propagar cedros y pinos de esta manera. Se propagan exclusivamente por semillas. Los olmos, por otro lado, se pueden cultivar muy rápidamente a partir de esquejes, al igual que la mayoría de los árboles y arbustos utilizados para setos como el ligustro, el carpe, el arce de campo, el agracejo y el olmo enano.

Bonsai de Lanta Camara. Estilo Sekijoju
Bonsai de Lanta Camara. Estilo Sekijoju

Bonsai cultivado a partir de semillas

Crecer a partir de semillas es la forma más duradera de formar un bonsái. Se necesitan de 12 a 15 años para obtener aproximadamente plantas parecidas a los bonsáis a partir de semillas. La mayoría de las plantas que se venden en los centros hortícolas y viveros son de esta edad. ¿Para qué es un viaje tan largo?

Hay algunos tipos de árboles en los que se puede lograr la forma óptima solo si comienza a formar la planta desde los primeros días de su vida. Esto se aplica, por ejemplo, a los olmos, a partir de los cuales se planea formar un bonsái en un estilo estrictamente vertical. En tales plantas, es necesario cortar parte de las raíces ya en el primer año y regular el crecimiento de los tallos jóvenes mediante la poda.

Después de unos 20 años, ya se notará claramente que estas plantas se formaron en una etapa temprana de su desarrollo. Esto se puede determinar principalmente por la base de las raíces. Todas las raíces que sobresalen en la superficie del suelo divergen del tronco en forma de estrella, y los propios troncos tienen una forma hermosa. Al mirar la base de las ramas, llama la atención su distribución armoniosa.

La proporción entre la altura del tronco y la altura de la copa forma una relación espacial equilibrada. Todos estos beneficios provienen del cultivo de plantas a partir de semillas. En las plántulas de árboles de coníferas de un año y dos años, los troncos pueden doblarse muy fuertemente, dándoles una forma compleja.

En todas las coníferas con corteza rugosa, el alambre aplicado a los troncos y ramas debe crecer en la madera hasta una profundidad del grosor de la corteza. Debido a esto, el tronco doblado y desigual recibe además el efecto de heridas curadas, que se curan rápidamente en las plantas jóvenes.

Los pinos negros de dos años, por ejemplo, pueden doblarse con mucha fuerza en invierno, lo que solo es posible con plántulas. Se permite que el alambre superpuesto crezca en la corteza y se retira solo después de 3 años, sin temor a que la planta se dañe.

Bonsai miniatura
Bonsai miniatura

Más tarde, el alambre se puede volver a aplicar para obtener nuevamente el efecto de cicatrización. Cuando la planta crezca a tal punto que estará lista para exhibirse como bonsái durante los próximos 45 años, en ningún caso se debe permitir que el alambre crezca en el tronco. Dado que con la edad, el grosor del tronco de las plantas crece mucho más lentamente, las heridas del alambre que han crecido en la corteza empeoran mucho y tomará más de una docena de años para que los últimos rastros del alambre se vuelvan invisibles.

Recoger semillas de árboles por tu cuenta es muy emocionante y está lleno de sorpresas. Mientras camina en el parque o en el bosque, constantemente puede encontrar más y más semillas de árboles y arbustos. Si las semillas de bonsai se cosechan en el otoño, se pueden sembrar directamente en contenedores de semillas o contenedores de bonsai.

Estas son semillas de cáscara dura como las de cereza, endrino, espino, avellano, enebro. Las semillas de estos árboles se siembran en un recipiente plano de arena húmeda y se cubren con una capa de arena en la parte superior. Luego, el recipiente se cubre con papel de aluminio para que los cultivos no se sequen. Después de eso, el recipiente con las semillas sembradas se saca a la calle en un lugar oscurecido por la luz solar directa y se deja allí durante todo el invierno para que la dura cáscara de las semillas se agriete bajo la influencia de las heladas. En primavera aparecen los primeros brotes.

Por lo general, no todas las semillas germinan. En este caso, dichas semillas no se tiran, pero están tratando de obtener plántulas de ellas para el próximo año. También puede congelar artificialmente las semillas en el frigorífico. Las semillas de bonsái de cáscara blanda se pueden sembrar parcialmente en el otoño, inmediatamente después de la cosecha. Las semillas de pino de montaña se cosechan en agosto y se siembran inmediatamente. Germinan a las 34 semanas.

El recipiente con las plántulas emergentes se deja caer en un lugar protegido del clima para que las plántulas tiernas no mueran en invierno por secar el suelo. Las semillas de la mayoría de los arces que se encuentran en Alemania también germinan el año en que se cosechan.

Para hacer esto, proceda de la siguiente manera: las semillas se rocían en un recipiente plano con arena húmeda, después de lo cual se rocían con agua de una botella rociadora. Luego se coloca un periódico sobre las semillas para mantenerlas húmedas y para permitir que pase algo de luz a través del periódico, ya que las semillas de arce necesitan luz para germinar. Si el invierno es templado, los primeros brotes ya aparecen en invierno. Un año después, la próxima primavera, cuando las plántulas estén un poco lignificadas, se pueden plantar con cuidado en macetas pequeñas y realizar podas formadoras durante el verano.

Bonsai de Sargent Juniper. Se cultiva desde 1905. Estilo Han-Kengai
Bonsai de Sargent Juniper. Se cultiva desde 1905. Estilo Han-Kengai

Tamaños de bonsai

Los bonsáis pueden variar mucho de tamaño. Los más pequeños apenas alcanzan los 8 cm de altura, sin embargo, también hay árboles de un tamaño impresionante de 130 cm de altura. Este no es el caso de que los bonsáis pequeños sean jóvenes y los bonsáis grandes sean viejos, cultivados durante muchos años.

El tamaño futuro del bonsái se establece aproximadamente al comienzo de la formación. La mayoría de las veces, las principales ramas del esqueleto, al menos sus rudimentos, ya están en la planta, y determinan en gran medida en qué estilo se puede formar un bonsái. Y aunque a lo largo de los años el bonsái crece varios centímetros de altura, el crecimiento del árbol se limita principalmente al desarrollo de la forma ideal, que busca el aficionado.

Para árboles con hojas grandes o agujas largas, se debe establecer un tamaño mínimo en el que se puedan representar en la proporción correcta (la relación entre el tamaño de las hojas y el tamaño del árbol en sí). Entonces, por ejemplo, una castaña debe tener entre 1,20 y 1,50 m de altura para lucir armoniosa.

Bonsai de enebro
Bonsai de enebro

Árboles adecuados para diferentes tamaños de bonsai

  • 8-20 cm: enebro, irga, rododendro, abeto;
  • 20-30 cm: agracejo, arce de campo, arce de roca, ligustro, pino de montaña con pequeñas agujas;
  • 30-70 cm: abedul, avellano, pino, arce de hojas de fresno (americano), olmo;
  • 60-100 cm: haya, roble, saúco, arce falso sicomoro (sicomoro), arce de hoja plana, pino negro, alerce, tilo, fresno, arce de hoja de fresno;
  • 100-130 cm: plátano, castaño, pino negro, saúco, acacia, glicina.

Características del cultivo de bonsai

Para la formación de una cierta forma de las ramas y el tronco del bonsái, por lo general, no puede prescindir del uso de alambre. No importa en absoluto si coloca alambre en las ramas o cambia su dirección con la ayuda de dispositivos tensores, cualquier técnica de trabajo con alambre es muy importante para la formación de bonsáis.

La colocación de cables es la técnica que más tiempo requiere para dar forma a los bonsáis, especialmente en las coníferas. Aquí es necesario fijar con alambre todas las ramas sin excepción hasta la parte superior de los brotes. En los árboles de hoja caduca, la forma a menudo se puede ajustar perfectamente solo mediante la poda, y la necesidad de cablear las ramas es relativamente rara.

En árboles con corteza lisa, como haya, olmo, arce, tilo, el alambre debe permanecer en las plantas solo por un corto tiempo, ya que las feas marcas del alambre enterrado en el tronco permanecen visibles durante décadas. Las cosas son bastante diferentes con los enebros o los pinos.

Estos árboles tienen una corteza rugosa y las marcas de cables crecen con relativa rapidez. Sin embargo, incluso en tales árboles, no se debe permitir que el alambre superpuesto crezca en la corteza, ya que de lo contrario también se formarán aquí cicatrices en forma de espiral en el tronco.

Con el comienzo del flujo de savia y el crecimiento de brotes jóvenes en la primavera, las ramas se vuelven rápidamente más gruesas, por lo tanto, el alambre debe aplicarse muy débilmente y luego revisarse regularmente para que no corte la corteza o no crezca en la madera.

Después de aproximadamente tres meses, la forma deseada generalmente se estabiliza y se puede quitar el cable. Se muerde cuidadosamente con un cortador de alambre y no se desenrolla, ya que esto puede romper fácilmente las ramas.

La colocación correcta de los cables requiere habilidad y destreza. Por lo tanto, antes de comenzar a cablear las frágiles ramas de los bonsáis, puede practicar la aplicación de cables a las ramas de los árboles de un jardín o bosque.

El alambre utilizado es alambre bonsai de aluminio revestido de cobre de varios espesores, de 0,7 a 7 mm, vendido en comercios especializados. Para determinar el grosor correcto del cable, hay una regla básica: grosor del cable = 1/3 del grosor de la rama que fija. Por lo tanto, con un grosor de rama de 1 cm, se debe utilizar un alambre con un grosor de aproximadamente 3 mm.

El alambre de hierro o el alambre utilizado en floristería no es adecuado para la formación de bonsáis, porque no es lo suficientemente flexible y se oxida. Cuando el bonsái se forma por primera vez a partir de la planta original, el alambre se aplica por completo a todas las ramas, incluidas sus partes más delgadas.

En este caso, ninguna rama debe cruzarse con otra. Finalmente, a cada rama se le da individualmente la dirección y forma deseadas. El alambre de bonsai no está hecho para decorar el árbol, sino solo para mejorar y cambiar su forma.

Los bonsáis con alambre aplicado al tronco y las ramas no deben mostrarse ni exhibirse en exposiciones. Las grapas de alambre se utilizan donde ya no es posible lograr el resultado deseado mediante la imposición de alambre, por ejemplo, cuando se cambia la dirección de crecimiento de ramas y troncos gruesos.

Este trabajo requiere cierta cantidad de fuerza. En este caso, es necesario verificar regularmente si el cable ha crecido en la madera y, de vez en cuando, reorganizar los soportes.

Para no dañar la corteza del árbol con soportes de alambre, se colocan piezas de cuero debajo de ellos. Cambiar la dirección de crecimiento de las ramas con la ayuda de dispositivos de alambre tensores es apropiado cuando ya no es posible aplicar alambre en ramas demasiado gruesas y poderosas.

Tirar de las ramas hacia abajo, por supuesto, no es un proceso tan laborioso como colocar el cable. La desventaja de los tensores de alambre es que este método le permite cambiar la dirección de crecimiento de la rama en una sola dirección específica. Esta técnica de modelado de bonsai se usa principalmente donde las ramas crecen hacia arriba y necesitan ser tiradas hacia abajo.

Aprender a dar forma precisa y precisa a un bonsái con alambre requiere tiempo y entrenamiento. Por eso es recomendable como ejercicio poner alambre a menudo en los árboles y darle a las ramas una forma diferente. Solo a través de un entrenamiento regular puedes mejorar constantemente tu habilidad en la formación de bonsáis.

Rododendro indio en forma de bonsai
Rododendro indio en forma de bonsai

Bonsai de envejecimiento artificial

Se utilizan varias técnicas y técnicas para dar a un bonsái relativamente joven la apariencia de un árbol viejo. Uno de ellos es la eliminación de la corteza de las ramas y el tronco con un cuchillo o pinzas. El trabajo será más difícil cuando sea necesario cortar o dividir el tronco. Para practicar estas técnicas, necesita algunos conocimientos teóricos y experiencia práctica.

Además, debe saber que no se puede quitar toda la corteza de aquellas ramas o troncos que se supone deben quedar vivos. Es necesario dejar finas tiras de corteza que lleguen a la parte superior de la rama o tronco, por donde fluirán el agua y los nutrientes hacia las agujas.

La situación es diferente con partes de ramas y troncos que deberían estar muertos en el bonsái. De ellos, la corteza se puede quitar por completo y procesar la madera desnuda con un cuchillo para tallar madera. Quitar la corteza de las ramas y el tronco no es particularmente difícil, sin embargo, procesar madera desnuda con un cuchillo para tallar madera (cincel) requiere cierta habilidad.

Para dominar con seguridad estas técnicas especiales, es imperativo observar las plantas en la naturaleza. Los árboles en "zonas de guerra", es decir, en lugares particularmente abiertos y desprotegidos, son los mejores ejemplos.

Se debe prestar especial atención a los árboles marcados por rayos, cortavientos o sequía. Antes de comenzar a trabajar, es necesario preparar una herramienta y ayudas adecuadas. Entre ellos debe haber un juego de cuchillos para tallar madera, alicates para quitar la corteza, tenazas de forma cóncava, piel, un agente blanqueador especial con un tinte para impregnar la madera desnuda.

También hay muchas herramientas eléctricas que facilitan mucho el trabajo. Sin embargo, son más difíciles de manejar. Es por eso que al comienzo de dominar las técnicas de envejecimiento del bonsái, es necesario utilizar una herramienta convencional. Aquellos que se dedican constantemente a este oficio, utilizando las herramientas adecuadas, descubrirán rápidamente qué herramienta eléctrica para tallar madera se puede usar.

Sharimiki es una técnica de envejecimiento artificial, en la que se quita la corteza de una parte importante de las ramas del bonsái, después de lo cual la madera desnuda se procesa con un cuchillo o un cortador especial. Los principiantes no deben usar plantas costosas para esto, porque toma un tiempo desarrollar el sentido de forma necesario.

Los sabamiks se llaman bonsáis de tronco dividido. Exteriormente, parecen árboles alcanzados por un rayo. Muy a menudo ya no representan árboles enteros, pero son muy expresivos. En bonsái, este efecto se puede lograr partiendo el tronco con pinzas y cuñas. Gracias a esto, el árbol en sí se vuelve más poderoso y fuerte.

Las plantas que se encuentran en la naturaleza adecuadas para la sabamika, que tienen el grosor de tronco deseado, a menudo superan los 2 m de altura. Para obtener un bonsái de un formato adecuado, primero se acortan en altura a 70-80 cm. De esto, es posible formar la futura copa del árbol en tales como si fuera alcanzado por un rayo. La parte superior del tronco debe afilarse para que el árbol luzca natural. Las bolas se pueden usar en tales lugares del tronco.

Bonsai de arce rojo
Bonsai de arce rojo

Mantener pequeñas agujas y brotes en pinos y abetos

Los pinos que crecen en los bosques de Alemania a menudo tienen agujas muy largas, especialmente el pino negro. El tamaño de las agujas en estos árboles se puede reducir ligeramente regando menos la planta y usando una mezcla para macetas más magra. También es deseable aplicar fertilizantes con menos frecuencia.

Para mantener la forma general de pinos y abetos compacta y armoniosa, las puntas de los brotes jóvenes se rompen de los pinos desde abril hasta principios de mayo. En los abetos, se permite que los brotes jóvenes crezcan un poco y luego se acortan a la mitad o dos tercios.

Debido a la ruptura radical o al corte de la parte superior de los brotes jóvenes con la punta de las tijeras durante el verano, se forman nuevos brotes tiernos en la parte de las ramas cubiertas de agujas, que florecen al año siguiente. Un año después, se forman nuevos brotes apicales.

Se les permite crecer lo suficiente y luego se acortan en un tercio o un cuarto de su longitud. Desde septiembre hasta finales de octubre, se despluman o recortan las agujas de dos o tres años.

Bonsai de rododendro
Bonsai de rododendro

Capas de aire en bonsai

Las capas de aire en los bonsáis se obtienen en los casos en que un tronco demasiado alto viola la armonía del árbol, además, con raíces feas o divergentes de manera desigual o cuando el tronco del árbol rejuvenece hacia abajo.

También se pueden obtener capas de aire de hermosas ramas de árboles que crecen en condiciones naturales. Los aficionados y coleccionistas del bonsái en Alemania no usan capas con tanta frecuencia como lo hacen en Japón, por ejemplo. Sin embargo, esta técnica es necesaria para que muchos bonsáis mejoren la forma del árbol u obtengan un nuevo bonsái de una hermosa rama similar a un bonsái. La técnica en sí no es particularmente difícil de obtener capas de aire. Las coníferas tardan más que los árboles de hoja caduca.

Técnica de obtención de capas de aire en árboles de hoja caduca

Suponga que desea obtener un corte de aire de un bonsái con un tallo mal formado. Para hacer esto, se hace una incisión circular en el tronco o rama sobre el lugar feo formado y se quita una tira de corteza. Luego, se ata una pequeña cantidad de musgo sphagnum húmedo al sitio del corte. Sobre el musgo, se fija una especie de carcasa más grande de una mosquitera de metal, que se llena con tierra para macetas para bonsáis.

Luego, la planta se riega como de costumbre. A finales de otoño, se comprueba el punto de corte. Para hacer esto, abra la malla metálica y retire con cuidado la tierra y el musgo. Si las raíces se forman uniformemente alrededor de toda la circunferencia del corte, entonces la malla de metal se fija en el mismo lugar y nuevamente llena su parte interna con tierra. Ahora debe esperar hasta que se formen raíces más fuertes y poderosas. Luego, el tronco se puede cortar ligeramente por debajo de las nuevas raíces y el nuevo bonsái resultante se puede plantar en un recipiente.

Bonsai en estilo Sokan, Sokan
Bonsai en estilo Sokan, Sokan

Técnica de obtención de capas de aire en coníferas

La técnica aquí es ligeramente diferente. En el tronco del árbol, no se hace un corte circular, sino que se aplica un bucle de alambre, después de lo cual se tira con fuerza y se gira para que el alambre corte un poco la corteza. Luego, con un martillo pequeño, golpee suavemente el alambre alrededor del tronco para que se formen pequeñas heridas en la corteza. De esta forma, se puede estimular la formación de raíces. Una pequeña parte del tronco o rama en la parte superior del alambre se trata con un estimulador de crecimiento (fitohormona).

Luego, se aplica un puñado de musgo sphagnum húmedo en este lugar y se fija con estopa o cordel. Después de eso, se aplica una malla metálica alrededor del tronco, como en el primer caso, y se llena con tierra para macetas para bonsai. Después de uno o dos años, se forman nuevas raíces. Cuando son lo suficientemente fuertes para nutrir al árbol con agua y minerales, el tronco del árbol bonsai entre las raíces nuevas y viejas se puede cortar y plantar en un recipiente.

En árboles de hoja caduca, el acodo aéreo se realiza desde mediados hasta finales de abril. Puede realizar un procedimiento similar para las coníferas un poco más tarde. Al mismo tiempo, la temperatura del aire debe estar en el rango de 18-22 o C. El cuidado de las plantas es el mismo que para los bonsáis recién plantados, es decir: debe colocar las plantas en un lugar ligeramente sombreado y girarlas cada 14 días, ya que las raíces crecen más rápido en zonas sombreadas.

Las plantas no se podan durante la producción de capas de aire, ya que el fuerte crecimiento de ramas y brotes contribuye a una formación de raíces más poderosa. Las plantas de las que se obtienen las capas de aire deben ser sanas y de crecimiento vigoroso. Las plantas jóvenes producen capas de aire más rápido que las viejas. En los árboles de hoja caduca, las raíces a menudo se forman después de 3-4 meses.

Las coníferas se arraigan muy lentamente. En los pinos, el proceso de formación de raíces puede tardar de 4 a 5 años. Para los principiantes, es mucho más prudente obtener capas de aire a partir de material vegetal joven y de bajo valor para probar la reacción de las plantas a este método de propagación vegetativa.

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